
Para elegir a los futuros representantes del Gobierno sin cometer errores, como ya ha ocurrido en designaciones de ministros y subsecretarios, es que las nuevas autoridades tomaron mayores resguardos para chequear sus datos.
Por ejemplo, la Democracia Cristiana (DC) repartió la semana pasada una “declaración jurada simple” que debía ser llenada por los aspirantes a cargos públicos. En dicho documento, los postulantes debían dar fe de que no tienen causas pendientes en la justicia, deudas comerciales u otras causas de eventuales flancos de críticas o inhabilidades.
El mismo método fue asumido por algunos intendentes designados, quienes incluso han incluido en categorías como que los postulantes señalen si han mantenido una conducta de acuerdo con la “moral y las buenas costumbres”.
Entre los nombres que corren con más fuerza para las gobernaciones, destacan el de Paola Fernández, los concejales Claudia Barrientos y José Aguilante, Edmundo “Pocho” Leiva y Carolina Saldivia, para la de Magallanes.
En la Gobernación de la Provincia Antártica, Nancy Dittmar y Claudio Flores.
Por Última Esperanza, igualmente, corre con ventaja el consejero regional José Ruiz.