Ayer, por primera vez, la comunidad tuvo la oportunidad de visitar la Casa de los Intendentes. En esta actividad, el intendente Claudio Radonich fue acompañado durante el recorrido por Sofía y Roberto, hijos del ex jefe del Gobierno Regional, Cecil Rasmussen. La actividad se desarrolló en dos turnos, durante la mañana de 12.00 a 13.30 horas y en la tarde de 15.00 a 18.00 horas y fue organizada por la Intendencia Regional de Magallanes con el objetivo de acercar el patrimonio cultural a las personas.
En la oportunidad, el jefe del Gobierno Regional, Claudio Radonich, recorrió la residencia junto a Sofía y Roberto, hijos del ex intendente Cecil Rasmunssen, quien fuera la primera autoridad en vivir allí. A ellos se le sumó el ex chofer José Biott, el cocinero Guillermo Uribe y una veintena de personas.
Radonich, dijo que era muy satisfactorio poder compartir con las personas que vivieron en esta casa porque son parte de la historia. “Uno se pregunta por qué esto no se hizo antes, estar con el primer cocinero, el conductor y con las primeras personas que vivieron aquí que son los hijos del ex intendente Rasmussen, del que incluso hay una población con su nombre y que no vienen a este lugar desde el año 1958. Nunca es tarde y es bueno que más gente la pueda conocer, porque es algo que está tan cercano, pero tan lejano a la vez, está frente a la plaza, al lado de la intendencia y la Iglesia Catedral, pero tan poca gente la conoce y esto es un patrimonio de todos”, señaló.
El intendente comentó que él tenía la idea de abrir la casa al público en el mes de septiembre pero tuvieron varios inconvenientes. “Primero se reventó una matriz de agua, luego en diciembre cuando todo estaba listo nuevamente se rompió una cañería y ahora era la oportunidad que teníamos. Yo pienso que el patrimonio es de todos, pero para cuidarlo tenemos que conocerlo”, expresó.
Sofía Rasmussen, por su parte, manifestó. “Yo siento mucha emoción al recordar esta casa, porque yo tenía 20 años cuando viví acá y fue una época de mi juventud en que la pasé muy bien. La casa está igual hay algunos cambios respecto del mobiliario, pero se mantienen los muebles de comedor antiguo que creo tienen más de un siglo y que fueron restaurados. La casa está muy bonita, me parece bien que la gente la conozca, no creo que sirva como residencia permanente del intendente porque su mantención es muy costosa, pero sí se puede emplear para recepciones porque tiene su atractivo”, expresó.
Guillermo Uribe comentó que él recuerda la casa con una nostalgia tremenda porque cuando fue inaugurada a él le toco venir a servir el cóctel. “En esos años yo trabajaba en el Hotel Kosmos y me designaron para venir a atender a la gente durante su inauguración. Tuve la suerte que cuando entra el Presidente Carlos Ibáñez del Campo pasó a saludarme y se sorprendió al ver un cocinero tan joven. Yo en esos años tenía 17 años. Es lindo que se abra al público y la gente tenga lo oportunidad de conocerla”, señaló.
El inmueble ubicado en la zona típica de Punta Arenas, comenzó su edificación en el año 1948 y fue inaugurado durante la presidencia de Carlos Ibáñez del Campo, el 23 de noviembre de 1957, siendo el intendente de la Provincia, Cecil Rasmussen.
La obra se ejecutó por una necesidad de la época de contar con una casa habitación para ser utilizada por el representante del Ejecutivo en la Provincia de Magallanes. Su construcción posee un estilo neoclásico contemporáneo, su construcción es de albañilería reforzada, donde predomina el espesor de muro, losas de hormigón armado, con molduras, balaústres, cornisas y detalles de gran calidad.
Cuenta contres niveles y la escalera que conecta estos tres niveles está contenida por un muro circular con bloque de vidrio que le otorgan gran luminosidad.
Fue declarada patrimonio cultural en 1991, durante el Gobierno de Patricio Aylwin Azócar.
Restauración
El proyecto de restauración tuvo como objetivo devolverle al inmueble su carácter original, efectuando trabajos en el interior y exterior de la propiedad. En la parte interna se restauraron los muebles originales y las pinturas, se repuso el revestimiento de los muros, las puertas, ventanas, el sistema de evacuación de aguas lluvias, las molduras y los cielos, entre otras intervenciones. A nivel externo, las obras estuvieron enfocadas en la fachada de la casa y se normalizaron las instalaciones básicas de agua, gas y electricidad, instalando también sistemas de seguridad contra incendios.
El presupuesto superó los $ 515 millones y se inauguró el 16 de julio de 2012.