
“Formar personas es la responsabilidad de todo profesor y es reconfortante saber que, aunque el ambiente es totalmente diferente, en Chile y México se está haciendo un enorme esfuerzo por mejorar la calidad de la educación”, dijo convencida la profesora mexicana, Patricia Olavarrieta Díaz, quien durante el último mes participó en un intercambio docente y estudiantil entre el Colegio Pierre Faure, de Punta Arenas y la escuela Rafael Díaz Serdán, del estado mexicano de Veracrúz.
En el entendimiento que la formación de un estudiante, más allá de la cantidad de conocimientos, está en la calidad de estos y los valores que desde la familia y el colegio puedan ser transmitidos a los educandos “fue como nunca haberme ido de México porque compartimos ese deseo de formar mejores personas cada día”, dijo la docente que durante su experiencia centró su atención en los alumnos de 1º y 2º básico.
“Me tocó ver como los profesores se preparan verdaderamente para sus alumos y es muy gratificante saber que en diferentes partes del mundo hay un grupo de personas que tienen fe en el proyecto de educación personalizada. Esto no es un proyecto para un colegio, es una didáctica para la vida”, dijo convencida la profesora con 32 años de experiencia en educación básica.
Desde una panorámica general de la educación, en un país con costumbres y realidades diferentes a su natal México, la profesora Patricia enfatizó que “ninguna profesion tiene tanta responsabilidad como la de un maestro, ya que forman personas y son ellos, nuestros estudiantes, los que años después salen al mundo y toman las riendas de la sociedad”. Además de su intervención en el Colegio Pierre Faure, la docente conoció diferentes establecimientos educaiconales de la capital regional.