
De acuerdo a una decisión del comandante en jefe supremo de las Fuerzas Armadas de Ucrania y del ministro interino de Defensa y en base a la orden del jefe del Estado Mayor (...), se autoriza el uso de armas a los destacamentos de las Fuerzas Armadas de Ucrania emplazados en Crimea”, señala el departamento en un comunicado.
Esta decisión se tomó tras la muerte de un suboficial ucraniano durante el asalto de tropas presuntamente rusas, a una unidad militar de cartografía en Simferópol, capital de la autonomía ucraniana declarada actualmente por el Kremlin parte de Rusia.
El Ministerio de Defensa explicó que el soldado murió de un disparo en el corazón, mientras que otros dos militares ucranianos resultaron heridos en el ataque.
“Los agresores iban con uniformes de las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa sin distintivos y armados con fusiles de asalto y un rifle de francotirador”, agrega el comunicado.
Crimea tiene unos dos millones de habitantes, de los cuales cerca del 60% es ruso, el 24% ucraniano y el 12% tártaro. El domingo se realizó un reférendum en el que ganó por una gran mayoría la anexión a Rusia.
La Organización del Tratado del Atlántico Norte desplegó el miércoles dos aviones de vigilancia para monitorear el espacio aéreo de Ucrania y movimientos de barcos en el Mar Negro, mientras que Rusia consolidaba su presencia militar en Crimea.
El jefe del Gobierno ucraniano informó que se ha puesto en contacto con los ministros de Defensa de Reino Unido, Estados Unidos y Rusia, como países firmantes del Tratado de Budapest que daba garantías de la soberanía e integridad territorial de Ucrania después de que Kiev se desprendió de su arsenal nuclear.
“Sólo se puede dar una calificación a lo sucedido hoy en Moscú. Es un asalto de magnitud internacional, cuando con ayuda de tropas y armas asaltan otro país”, ha afirmado. El primer ministro ha añadido que “Rusia se ha aislado hoy de toda la comunidad internacional, y la violación del derecho internacional conllevará consecuencias políticas y diplomáticas”.