El edificio consistorial, un “arena” y una piscina olímpica, surgen como tareas prioritarias para impulsar por parte de Antonio Ríspoli, en su nuevo cargo de consejero regional de Magallanes. Hace poco más de un año ocupaba una silla como concejal de Punta Arenas; hoy, lo hace en la sala de sesiones del consejo, donde deberá adoptar decisiones relacionadas directamente con el desarrollo social, cultural y económico de la Región de Magallanes.
Anoche, Ríspoli participó del programa “Barómetro” de Pingüino TV. En su diálogo con los periodistas Nikolay Stagnaro y Gerardo Rafael Álvarez, reconoció que los primeros días como consejero no han sido fáciles, principalmente por no haber quedado a la cabeza de la comisión de deporte y cultura, áreas en las que cumplió un destacado papel como concejal, asumiendo infinidad de proyectos, que el propio consejero menciona: “Tenía muchas ganas de asumir en esas condiciones, porque es lo que yo sé hacer. En el concejo dejé los pies, de un lado para otro. Gestioné más de 39 multicanchas, canchas de fútbol, recintos deportivos, eso la gente lo sabe y lo reconoce”.
Del momento político que vive el país con los nombramientos de autoridades, opina que “es normal lo que está sucediendo. Siempre hemos dicho que los partidos son una bolsa de gatos, y de trabajo también. Pero es válido que la autoridad que llegue, en este caso el intendente Jorge Flies, quiera trabajar con gente de su confianza. Además, estoy de acuerdo que los partidos que conforman los conglomerados quieran imponer sus nombres”.
En su caso, recordó que él fue demócrata cristiano buena parte de su vida (hasta 2008), reconociendo que por “una contingencia” se convirtió en independiente y luego ingresó a la Unión Demócrata Independiente (UDI). “A la UDI entré como independiente, firmando los registros luego de ingresar al consejo del partido, porque de lo contrario no iba a tener trabajo en Punta Arenas. Soy sincero, porque así era la cosa. Hoy tengo 72 años y puedo decir que he trabajado con todos los presidentes a partir de los años ’50. Con el único que no lo hice fue con Eduardo Frei (Montalva), porque en ese tiempo estaba en el fútbol profesional, pero cuando retorné a Punta Arenas y era conocido del senador (Alfredo) Lorca ingresé a trabajar en la Caja de Empleados Particulares”.
Sobre los proyectos que instan concretar en Magallanes, se detiene en el edificio consistorial, que logre reunir todos los servicios del municipio de Punta Arenas. “Es un tema que me preocupa y reconozco que vez que viajo a Puerto Natales siento sana envidia al ver el edificio que tiene su municipio. Nosotros en la época del alcalde Mimica iniciamos el proceso para concretar este proyecto, pero nunca se llegó a nada. Por lo menos ahora ya aprobaron algunas platas”.