
Emocionada recibió de manos de la alcaldesa un presente en reconocimiento a su desempeño laboral, en una época donde las condiciones de trabajo se alejan inmensamente de la infraestructura educacional que hoy tienen los profesores y alumnos de Villa Cerro Castillo.
“Es una emoción muy grande que realmente aprieta el corazón, dan ganas de llorar, también un sentimiento de felicidad, volver a mi primer lugar de trabajo, es muy emocionante, fue el primer lugar donde ejercí la docencia, viví momentos muy felices” comentó.
Además dijo que la localidad ha cambiado mucho, cuando ella ejercía como docente aún no era una villa sino que una estancia, donde enseñaba a los hijos de los trabajadores de la Ganadera Tierra del Fuego que funcionaba en aquel entonces. “Ahora está muy moderno, se ve como una mini ciudad, se nota que hay mucho aseo mucho orden, está muy bonito” dijo la ex profesora.
También tuvo palabras para dedicar a los actuales docentes y alumnos de la Escuela Ramón Serrano Montaner: “Ellos están trabajando en un palacio, tienen hartos implementos, les pido que sigan laborando como lo han hecho y mejor, noto que están contentos, los niños se ven que están bien con sus profesores, eso es lo que capte, se ve que hay muchas buenas vibras entre profesores y alumnos” manifestó.
Irma Trujillo, volvió después de 50 años a Villa Cerro Castillo y recorrió las dependencias de la escuela, que se diferencian totalmente del lugar donde ella trabajó, y vivió muchos de los momentos más felices de su vida.