Al lugar concurrió medio centenar de voluntarios, los que trabajaron en el control de las llamas por cerca de una hora, evitando que el fuego alcanzara otras dependencias y maquinarias.
La edificación pertenece a la empresa Magmar, dedicada a labores en caminos.
En el lugar había una camioneta en desarme, la que resultó destruida.
Según bomberos, el fuego arrasó con una oficina desocupada y no se registraron personas lesionadas.
En el taller se mantenía una gran cantidad de neumáticos, lo que originó una densa nube de humo que pudo percatarse en gran parte del sector norte de Punta Arenas.
Las causas están siendo investigadas por Bomberos, pero se presume que el fuego se originó por un calentador a leña, del cual se habría desprendido material incandescente.