“La promesa que hizo el ministro Máximo Pacheco en su reciente visita es fuerte: ‘El Gobierno va a mantener el subsidio al gas en Magallanes’, dijo. Ahora la comunidad debe exigir su cumplimiento”. La primera visita de altas autoridades a la Región de Magallanes fue la del ministro de Energía, Máximo Pacheco En otras zonas del país se replicaron periplos de altos secretarios de Estado muy vinculadas a las necesidades de la gente. ¿Qué ha querido instalar el Gobierno de Michelle Bachelet con estos guiños a regiones? Ella ha recalcado en repetidas oportunidades el sello ciudadano que pretende imprimirle a su administración. El Ejecutivo quiere entablar un diálogo directo con distintas agrupaciones y movimientos sociales. Y en Magallanes lo hay. El sábado pasado el ministro Pacheco se juntó con diversas entidades locales, a las cuales se les pidió exponer las necesidades. Ese cara a cara fue positivo, porque si bien desde Santiago venían determinadas ciertas decisiones, acá se le pudo expresar lo que siente y necesita la gente. Ahí mismo, se comprometió a mantener subsidios al gas y a reformar el proyecto de ley que crea un gobierno corporativo para ENAP. La frase de Pacheco es clave: “El Gobierno va a mantener el subsidio del gas que existe en Magallanes (...) Haremos todo lo necesario para que la región tenga gas residencial”. Eso es una promesa que la comunidad está obligada a recordarla durante el mandato de Bachelet. No obstante, quedaron pendientes la capitalización de la compañía y la definición de medidas energéticas y se fue con una carpeta de propuestas bajo el brazo, que, dijo, espera incluir en una agenda energética nacional, que será entregada al país antes de que se cumplan 100 días de Gobierno. Pero la promesa en Magallanes ya quedó y ahora la comunidad será la encargada de velar por su cumplimiento.