Que la Alegría ya Viene; que Gana la Gente, que Crecer con Igualdad, que Estoy Contigo, y que van a refundar la Concertación; bla, bla, bla…  Ahora más divididos que nunca, siguen esforzándose por seguir manejando los cargos públicos para los amigos y los militantes, no importa si son flojos o especialistas en manejo de dineros públicos para sus bolsillos.    
Después de mucho análisis, en la Concertación descubrieron que Frei es lo que hay, y, en un intento desesperado por mantenerse en el poder, lo están presentando como la opción del cambio… cuando todos sabemos que sólo quiere repetir un período como el de su gobierno, de seis años de un gobierno que sólo marcaba el paso.   
El sexsenio de Frei contó con una época de vacas gordas en términos de ingresos para el Fisco; una estructura económica que permitía crecer, pero que su gobierno la terminó por dormir;  fíjense que, a contar de 1996, nunca más el país volvió a crecer por sobre el 6%. En nada se anticipó al efecto tequila, ni la crisis asiática; período en que ni siquiera se aumentó el gasto público para enfrentar el temporal. Desde mitad de su gobierno, viene el gran período de estancamiento del país, y fundamentalmente, de  las regiones.
En la evaluación de la gente, recordemos dos épocas: a mediados de 1997, tenía sólo un 33% de aprobación a su gobierno. En julio del 2004, en una encuesta CEP, el 54,4% señalaba que “en ningún caso” votaría por Frei.
En Magallanes, la actuación del gobierno y  seguidores de Frei, es el reflejo del estancamiento, la pasividad y del querer  aferrarse a los cargos públicos de confianza, en otro intento desesperado porque el club de amigos siga gozando de altas remuneraciones y con la ley del esfuerzo mínimo. De la experiencia y carrera funcionaria de los servidores públicos  de verdad, el gobierno simplemente hace vista gorda y lo único que han logrado es que todos los días se sume más gente a la opción por el cambio y a concluir con casi 20 años de una concertación cansada y con mañas sólo para servir a unos pocos.