
Ayer nació la “Coalición por el cambio”, la nueva fuerza política para el Chile del mañana, no es la alianza tradicional que ha sido oposición a los gobiernos de la concertación, es la fuerza política que gobernará a Chile entre los años 2010 y 2014 con Sebastián Piñera si es elegido presidente, la tarea no es fácil para que se produzca este cambio, se requiere de una gran disciplina política de sus principales dirigentes políticos en especial de la tradicional alianza constituida por la UDI y RN, ahora con gente nueva de la talla del senador Fernando Flores , del senador Carlos Cantero, de Jorge Schaulson y de muchos otros dirigentes a nivel regional se podrá cumplir con un nuevo proyecto de gobierno; para llegar al objetivo final no se debe ser oposición por ser oposición o estar al otro lado del gobierno, la Concertación la tiene dentro de ella, importante es mostrar un programa de gobierno para cuatro años donde los compromisos sean claros y se cumplan con soluciones a los, problemas de la gente, no más discursos mentiras y promesas incumplidas. Como ejemplo: la elección de los gobiernos regionales y del intendente por votación popular, promesas de campaña en regiones de Frei, Lagos y Bachelet y hasta ahora, todo sigue igual, tal como lo dice la canción, se requieren leyes que permitan la flexibilidad laboral y la sana competencia y no lo que pasó con las farmacias, para mí el principal compromiso es con la salud pública y que parte de los millones de dólares ahorrados se invierta en ella, para qué le sirven a Chile 30 mil millones depositados en bancos de otros países aportando a la riqueza de esos países. Cuando se entienda que Chile está primero y no los partidos de turno en los gobiernos, este país será lo que la gente aspira a ser y así saldremos del apocamiento que por definición de los políticos chilenos, estos nos han encasillado en ricos, clase media (cada día queda menos) y pobres, estos últimos son carne de cañón para toda elección popular, dónde está la clase intelectual, los profesionales, artistas, escritores, artesanos, militares, y tantos otros que le dan la verdadera riqueza a un país.