Los 14 mil funcionarios de Gendarmería suspendieron ayer una paralización de labores de dos días al llegar a un acuerdo con el gobierno para estudiar sus demandas.
El otro conflicto laboral importante que enfrenta el gobierno, el de los profesores, se mantiene estancado al no lograr los 80 mil maestros de colegios públicos el pago inmediato de un bono que el gobierno ofrece hacerlo parcialmente este año y completarlo el 2010.
Los vigilantes carcelarios o gendarmes, como se denominan en el país, iniciaron el lunes un paro que impidió el traslado de reos a los tribunales, al tiempo que se acuartelaron en los recintos penales. La protesta se originó en las exigencias de los funcionarios de mejoras salariales y de sus condiciones laborales.
El gobierno tiene en el Congreso un proyecto de ley que contempla algunas de las demandas, pero los vigilantes exigen soluciones prontas.