Al borde de cerrar sus puertas y dejar sin trabajo a 80 personas, se encuentra la empresa Pesquera Arriagada y Compañía, luego que su dueña, Roxana Arriagada, y los trabajadores acusaran una “persecución” por parte de uno de los examinadores de la Inspección Provincial del Trabajo de Punta Arenas.
La empresaria aseguró que el fiscalizador fue hasta la pesquera, luego que el sábado sufrieran una intoxicación por cloro cinco trabajadores, y que “siempre demuestra poco criterio, ya que anda buscando el detalle para reprimir y mis trabajadores están todos felices con el ambiente laboral. Eso lo puedo asegurar”, dijo.
Además, la dueña de la pesquera dijo que se encuentran en proceso los informes correspondientes y que deberían arrojar que el cloro estaba rotulado. “De hecho, nosotros llamamos a las fiscalizaciones para hacer todo legal. Nos preocupamos de nuestros trabajadores, así que estamos tranquilos. Lo único que puedo decir, es que si la inspección sigue con esta persecución hacia mi empresa y cursa las multas que pretende, lamentablemente voy a tener que cerrar el 31 de mayo”, aseguró
A su vez, los trabajadores se mostraron preocupados y muy molestos con las intervenciones del organismo regulador, asegurando que los afectados se encontraban ayer en perfectas condiciones, desarrollando sus labores cotidianas. “Acá la gente está conforme y contenta con las condiciones laborales. La paga es buena y el trato excelente. Las comidas y la locomoción también”, comentaron los desconchadores y clasificadores de erizos, aprovechando de prometer que de seguir los problemas y el “hostigamiento a su jefa”, se dirigirán en masa a protestar a las oficinas de la inspección.
“Pedimos e invitamos al encargado general de la Inspección del Trabajo que se acerque a nuestro lugar de trabajo para que conozca la realidad que tenemos y lo importante que es para nosotros cuidar nuestra fuente laboral. Ojalá que nuestro trabajo no cierre sus puertas por motivos sin importancia”, comentó Paola Ruiz en representación de sus compañeros.