
Dos jóvenes que llamaron a los números de emergencias 132 y 133, de Bomberos y Carabineros respectivamente, para informar de un incendio en el sector sur de la ciudad, fueron condenados ayer por los tribunales de justicia luego que se comprobara que los anuncios eran falsos. Los sujetos deberán pagar una multa en dinero al Hogar del Niño Miraflores de Punta Arenas.
Con esta medida se crea un precedente legal en esta región para quienes realizan llamados falsos a instituciones u otras entidades de emergencia.
Esto confirma que no van a quedar impunes las llamadas falsas que recibe la Central de Emergencia de Bomberos y que en algunos casos han obligado al despacho de unidades al lugar de la llamada.