No hay ninguna duda de que detrás de la ex gripe porcina se mueven poderosos intereses económicos. Por eso la  TV no la corta de sus noticieros cotidianos. Si tomamos en cuenta que cada año mueren  de diarrea dos millones de niños que se podrían curar con un suero oral cuyo costo es de 25 centavos, pero los noticieros no lo mencionan; si consideramos además, que el sarampión y neumonía son enfermedades curables con vacunas baratas que podrían detener la muerte de diez millones de personas en el mundo cada año, pero esto los noticieros tampoco lo mencionan. Sin embargo,  hace unos años, cuando hizo su aparición en el mundo la gripe aviar, se armó en tremendo escándalo noticioso. “Que era una epidemia peligrosa”; es más, “que era una pandemia”. Pero sólo provocó la muerte a  250 personas en el mundo y durante 10 años, es decir 25 muertos por año como promedio, mientras que la gripe común mata a medio millón. Pero ¿por qué se armó tanto escándalo con la gripe aviar? No hay que buscar muy lejos. Con la gripe de “los pollos”, Roche y Relenza, multinacionales farmacéuticas que comercializan los antivirales, obtuvieron miles de millones de dólares de ganancias con la venta de Tamiflu, de dudosa efectividad. Ahora se armo la psicosis con la gripe que partió porcina, para terminar humana; que también tiene un padrino en las sombras, se trata del mismísimo Roche, metiendo nuevamente al milagroso Tamiflu al mercado, que ahora cuesta la módica suma de 50 dólares la cajita, argumentado que como se trata de un milagro y los milagros en esta época no son gratis como en los tiempos del Galileo. Si hurgamos un poquito tras el Tamiflu, encontraremos a la empresa norteamericana Golead Sciences, cuyo accionista principal es Donald Rumsfeld, Secretario de Defensa de Bush. Se me ocurre proponer que si la Gripe Humana es realmente una pandemia tan terrible como la anuncian ¿Por qué no interviene la Organización Mundial de la Salud y la declara problema de salud publica mundial y autoriza la fabricación gratuita de medicamentos genéricos para combatirla? ¿No seria una solución más real?