El subgerente de la oficina regional del Banco de Crédito e Inversiones, Jorge Benavente, dijo que trataron de encontrar una solución y que la idea es seguir conversando con la familia
Una demanda ejecutiva en contra de Jacqueline Leyton Mansilla interpuso en el Primer Juzgado de Letras de Punta Arenas el subgerente de la oficina regional del Banco de Crédito e Inversiones, Jorge Benavente Stuckrath, por una deuda que se eleva a los cuatro millones de pesos, equivalente a dos pagares a la vista impagos.
La funcionaria de la seremi de Salud que en agosto del año pasado fue baleada en la cabeza por su pareja José Toledo Mansilla, condenado por parricidio frustrado y que hoy en la tarde se conocerá la sentencia, era titular de dos tarjetas de crédito Visa y el uso de las mismas acumuló la millonaria deuda.
Para Juan Leyton, padre de la profesional, quien se encuentra prácticamente postrada y sometida a tratamientos en Santiago, dijo que esta es otra de las aristas y efectos colaterales de todo el daño que Toledo le provocó a su hija quien le usaba las tarjetas de crédito y andaba con la chequera.
Leyton dijo desconocer esta situación de la que se enteró a partir de la consulta que le hizo Diario El Pingüino, “pero que de ser así no me caben dudas que fue él (Toledo) quien la encalilló y es el culpable de que no se esté pagando la deuda porque todo sería diferente si nuestra hija estuviera bien”.
Agente del Banco
Independiente del tema social que en estos momentos afecta a Jacqueline Leyton, que la institución bancaria entiende y que por lo mismo ha tomado contacto con la familia para encontrarle una solución, el subgerente de la oficina regional del Banco de Crédito e Inversiones, Jorge Benavente dijo que existe una deuda, cuyos plazos están vencidos, y lo que corresponde en estos casos es iniciar las acciones judiciales que les confiere la ley. “Y es lo que estamos haciendo ahora, después de un año, porque tratamos de encontrar una solución pero ya no podemos seguir esperando”.
El ejecutivo dijo que la idea es seguir conversando con la familia, “porque en ningún caso queremos ejercer estas acciones, pero hay plazos que se cumplen y que tenemos que ejercerlos, lo que no significa que no podamos buscarle alguna solución”.