Los resultados de la última jornada llevada a cabo, entregaron importantes antecedentes sobre la forma en que los jóvenes perciben el problema y cómo creen que se podría aminorar.El embarazo adolescente se ha transformado una de las situaciones que con el tiempo se ha vuelto parte de la normalidad. Antiguamente ver a una niña de 14 años esperando un hijo era algo poco frecuente, ya sea por las radicales medidas familiares, o porque no sucedía a la escala que ocurre en la actualidad.
Según el último estudio realizado, en la Región de Magallanes habitan 38 mil jóvenes entre los 10 y 29 años, y la iniciación sexual es, en promedio, a los 17,6 años en hombres y a los 19,3 en mujeres. En 2007 se registraron 245 partos en el Sistema Público de Salud entre los 10 y 19 años, disminuyendo en 2008 a 219 partos.
Si bien las cifras han disminuido, los números son muy altos, por lo que la Secretaria Regional Ministerial de Salud ha estado trabajando para revertir los altos índices de embarazo adolescente no deseado y en la prevención de enfermedades sexuales.
“Los partos en la región han ido bajando. Quizás se visualiza de otra manera porque hay más inclusiones en el sistema educacional, en los lugares abiertos, en la sociedad en general. Es distinto a la que se veía años atrás”, explicó Susan Mayor, encargada de la Unidad Sexual y Prevención de VIH e ITS de la Seremi de Salud.
