Durante los primeros días de la próxima semana la mayor parte de los establecimientos educacionales del país volverán a sus actividades académicas, lo que implica el final de las vacaciones de invierno para los estudiantes.La mayoría de los alumnos están ansiosos por volver a las aulas para compartir las experiencias que disfrutaron durante la época invernal con sus compañeros.
Otros no están tan contentos, ya que volver a los estudios les implica dejar a los suyos. Este es el caso de un importante contingente de alumnos que comenzaron ayer el regreso a distantes puntos del país.
Para la mayoría de ellos ésta es la única oportunidad del año en la que pueden visitar a sus familias, por lo que aprovecharon al máximo los días que estuvieron cerca de sus seres queridos.
La partida
En el Aeropuerto Presidente Carlos Ibáñez del Campo se pudo observar ayer escenas de profundo cariño con motivo de la despedida de los magallánicos.
Cristián Asún permaneció dos semanas en la región y debe volver a Viña del Mar a continuar sus estudios de ecoturismo en la Universidad Andrés Bello. “Se siente bien estar acá algunos días con tu familia y amigos. Pero tengo realmente muchas ganas de volver a estudiar y ver a mis compañeros nuevamente. Son sentimientos encontrados”, comenta con emoción Asún.
En todo caso, el estudiante lamenta que se haya suspendido la Invernada en la Patagonia por la presencia del virus A(H1N1), ya que “iba a ir al carnaval, quería salir a la calle y disfrutar del espectáculo. Encuentro absurdo que se haya suspendido, ya que era una actividad al aire libre que no representaba mayor riesgo para la población. Es lamentable que se postergue una actividad cultural, de las pocas que hay en Magallanes, da lata”, declara algo molesto.
Por su parte, Víctor Fernández estudia ingeniería civil telemática en Valparaíso y relata que estuvo cerca de un mes de vacaciones en Magallanes compartiendo con sus seres queridos. “Voy a extrañar mucho a todos mis familiares y amigos, eso es obvio. Así que ahora hay que ir a esforzarse al máximo y estudiar el doble para lograr mi meta que es llegar a ser un profesional y volver con el cartón debajo del brazo”, declara con convicción el estudiante.
Otro de los que parte fuera de la región es Sebastián Velásquez. El joven de 21 años estudia comunicación audiovisual en el Instituto Santo Tomás en Santiago. Llegó a la terminal aérea acompañado de sus familiares, quienes entre besos y abrazos lo despidieron para que parta a reiniciar una nueva etapa en su vida académica. “Estuve nueve días compartiendo con la familia y los amigos, tratando de limpiarme un poco de la carga que significa vivir en lugar tan contaminado y estresante como Santiago. Creo que fue poco tiempo, pero lo disfruté a concho regaloneando con los míos”, comenta Fernández.
Pese al poco tiempo que permaneció en la región, el estudiante comenta: “Disfruté harto de las vacaciones. Hace años que no veía a Punta Arenas con tal cantidad de nieve, pero lamento que se haya suspendido el Festival de la Patagonia, era uno de los panoramas que tenía previsto para estas vacaciones, pero no se pudo. Me dio lata, es una de las pocas actividades que se pueden destacar en la región y se tuvo que suspender”, lamenta Fernández.
El vuelo está a punto de partir y los jóvenes se despiden de sus familiares. A algunas madres les brotan algunas lágrimas, las que intentan disimular para no entristecer a sus retoños. Los estudiantes parten al sector del aeropuerto para abordar el avión que los llevará rumbo a sus lugares de estudios. Entre su equipaje cargan, además de sus pertenencias, la esperanza, apoyo y cariño de sus seres queridos que les ayudará a enfrentar esta nueva etapa en el desafío de llegar a ser un profesional.
