
Junto con la alegría de entregar 17 viviendas sociales en Puerto Williams, la primera autoridad regional se trasladó 55 kilómetros al este y visitó la apartada localidad de Puerto Toro, el poblado más austral del mundo donde habitan en forma permanente 30 personas, los cuales además conviven con una población flotante cercana a los 200 pescadores artesanales.
Allí se reunió con la comunidad y conoció sus principales inquietudes, entre las que destacan la falta de tratamiento de agua potable, la necesaria instalación de una posta rural, la reparación de las viviendas y el mejoramiento de la conectividad.
Luego de escuchar a los pobladores, se comprometió a estudiar cada una de las demandas, manifestando que “es un privilegio haber podido estar en un rincón tan especial como Puerto Toro, donde existe un grupo humano excepcional. Tuvimos una reunión súper interesante, donde plantearon sus inquietudes y fuimos viendo cómo podíamos ir dándoles soluciones. Hay necesidades básicas que debemos cumplir, como habilitar una posta rural, que era lo que antiguamente existía, para que exista un paramédico disponible los 365 días del año. Otro tema urgente es potabilizar el agua. Para esto, en septiembre contararán con una persona que se encargue del tratamiento del agua y solicité a Obras Públicas que concrete a la brevedad un proyecto que mejore la potencia del agua y el deterioro de las tuberías en las casas”, explicó la autoridad.