Quien fuera detenida hace un mes por supuesto maltrato animal, se defiende y señala que ama a sus mascotas.
Además, narra que fue la fundadora de un partido político, trabajó en la campaña presidencial de Francisco Javier Errázuriz y que poseía una boutique, un centro de belleza y una academia de modelaje.
Su familia era dueña de un amplio terreno ubicado en la misma esquina donde reside: Kuzma Slavic con Avenida Bulnes.
Días difíciles ha debido enfrentar Marta Adriana Fuenzalida Gutiérrez, de 55 años, desde que fue detenida hace un mes tras ser acusada de maltratar animales, además de sentirse pre juzgada por Punta Arenas.
Fuenzalida fue bautizada como “La mujer de los perros”, ya que vivía con más de 30 canes y varios yacían muertos en su hogar. Incluso, ella misma  recuerda que en algún momento tuvo más de 120 mascotas.
Por años se han tejidos miles de leyendas urbanas en torno a ella. Es de modales dignos de una dama, pero su estado de salud se ha deteriorado bastante: camina con dificultad, ya que ha perdido gran porcentaje de su visión y no percibe detalles de los objetos que están a su alrededor.
Pero su relato es muy coherente y claro. Comienza por reconocer que el estado en que mantiene a sus perros no es el óptimo y ello va relacionado con las desgracias que ha sufrido en los últimos años. “Mi vida cambió mucho desde el año 2006, cuando falleció mi madre. He sufrido un grave deterioro de mi calidad de vida”, señala con nostalgia.
Comenta que vivía con su progenitora, Mercedes Gutiérrez, desde el principio de la década pasada, cuando se separó de su cónyuge. No tiene hijos ni hermanos, por lo que luego del fallecimiento de su madre quedó sola.
En ese entonces, Fuenzalida asegura que tenía una boutique, un centro de belleza, una academia de modelos y otros negocios. “Cuando me separé de quien era mi marido abandoné mis actividades empresariales para cuidar a mi madre, ya que ella tenía miedo de estar sola y el dinero de ella alcanzaba para cubrir nuestras necesidades y hobbies”, recuerda la mujer, quien desde ese entonces comenzó a recoger perros vagabundos.
La madre de Fuenzalida  percibía ingresos por diversos negocios y arriendos de propiedades. Además, era dueña de la cuadra donde ahora ella vive en una deteriorada casa: “Esa era la ‘Quinta Gutiérrez’, de una hectárea y media que era propiedad de mi familia”, relata la mujer.
Entre los lujos que Fuenzalida disfrutaba, cuenta que gustaba de comer varios días de la semana en los mejores restaurantes y viajar a diversos lugares. Incluso visitaba Santiago varias veces al mes sólo por el día para ver algún espectáculo.
Según afirma, a ella le interesó participar en política: “En la década del 90 apareció el Fra Fra (Francisco Javier Errázuriz, candidato presidencial y luego senador) y comencé a trabajar en su partido, pero siempre recogiendo perros”, recuerda. En años posteriores, cuenta que fundó un partido regional con el actual senador Antonio Horvath.
Fuenzalida declara que en ese entonces su madre pagaba a una empresa de transportes que llegaba al domicilio con su personal a limpiar los caniles y cambiar el aserrín sanitario. “Hasta el 2006 viví en un mundo de ‘Bilz y Pap’, aunque nunca con joyas, ya que soy alérgica a los metales”, dice sonriente.
Punto de quiebre
“Pero cuando mi madre falleció todo cambió. No pude hacer ni siquiera la posesión efectiva”, lamenta la mujer, ya que por esto no pudo vender terrenos que la hubiesen ayudado a mantenerse. Fuenzalida cambia el semblante y toma una actitud seria al relatar que, tiempo antes de morir, su madre le regaló a un hombre amigo de ella un terreno aledaño a su casa.
Si bien pudo finalmente hacer la posesión efectiva, la mujer comenta que se encontró con la desagradable sorpresa de que casi todos los terrenos habían sido cedidos al hombre que había recibido la otra propiedad previamente. “Me encontré con una escritura que señala que sólo me corresponde el 10% de lo que era la ‘Quinta Gutiérrez’, lamenta profundamente Fuenzalida