
Ayer casi no entró nadie a comprar mariscos, ni siquiera para pasar la resaca por el comienzo de las celebraciones que se realizó el 17 en la noche con la inauguración de las primeras fondas y ramadas.
Para los dueños de los locales que ofrecen los productos del mar, no es novedad que las ventas anden flojas por estos días, pero reconocen que esta vez la situación está muy mala.
La dueña de la Pescadería Puerto Montt, María Hernández, calificó la jornada como “ muy mala. Hay mucha baja de ventas. No anda nadie”, manifestó.
La mujer le atribuye esta disminución a que las personas en esta fecha prefieren mayormente carne y al cambio de ubicación de los negocios, debido que desde que tuvieron que dejar las antiguas instalaciones del mercado, ha disminuido el flujo de público. “Donde estábamos antes nos iba bien e igual. No teníamos estos días sin que nadie entrara”, afirmó.
Aunque no pierde la esperanza de que con el paso de las horas la situación repunte. “Ojalá se componga un poco. La gente hoy se levanta tarde, quizás eso también ha afectado”, estimó Hernández.
Un balance similar realizó Ademir Martínez, dueño de la Pescadería Stop, quien declaró que “está malísimo”.
Si bien reconoció que durante estas festividades “no se vende mucho”, también atribuyó este escenario a que “ahora hay muchos locales de venta de mariscos fuera del mercado. Hay más competencia”.
En su caso, previó que las ventas estarían bajas, por lo que no se abasteció como para otras fechas. “No trajimos mucho producto porque en todos los años se registra una baja”, puntualizó.