
Durante cuatro semanas se realizaron trabajos en el sector para dar cumplimiento a la instrucción emanada del Concejo Municipal que aprobó el retiro de estos elementos de control de velocidad.
Junto con ello, se mejoró la rasante original de la calzada, debido a que parte del contrato estipulaba que el pavimento debía quedar en perfectas condiciones una vez que los lomos de toro fueran eliminados.