A dos meses de las elecciones, ya nada resulta imposible. Y mucho menos si se trata de lograr un cupo como parlamentario, presidenciable o bien obtener un buen puesto de trabajo tras conocer a los ganadores.
El 5 de octubre no fue celebrado en Magallanes por la Concertación como antaño. Los representantes del Partido Humanista (PH), Jaime Jelincic (ex PRSD) y Luis Burgos (ex PPD y DC), lo hicieron por un lado. El lunes, en el salón principal de la “Sociedad de Empleados de Magallanes”, un grupo numeroso de concertacionistas y personas de diversos sectores políticos y sociales de la región, vinculados al triunfo del “No”, se reunieron para conmemorar el hecho. Entre ellos,   Jelincic y Burgos, quienes ratificaron a través de sus discursos, su espíritu ligado a la Concertación.
“Ellas son
nuestras candidatas”
Pero en otro lugar de la ciudad había otra celebración, encabezada por el presidente regional del Partido Radical Social Demócrata (PRSD), Alfredo Miranda. En su alocución, “Repollo” dijo: “Estas son las dos candidatas de la Concertación, Ana María Díaz y Carolina Goic”, haciendo alusión a quienes dicen representar “genuinamente” los postulados que había el 5 de octubre de 1988.
El “descolgado”
Por otra parte, el presidente provincial del Partido por la Democracia (PPD), Darío Ramos, volvió a mostrar inconsecuencias políticas al anunciar su alejamiento de la candidatura del presidenciable independiente Marco Enríquez-Ominami. Fuentes cercanas al pepedeísta dicen que esta nueva postura se debe al curioso acercamiento que logró en las últimas semanas con la candidata DC Carolina Goic. Nadie entiende nada.
Ayer, Ramos dio a conocer la declinación de su postura. Mediante un comunicado de prensa, Ramos manifestó que existe un “quiebre en el comando electoral de Marco Enríquez-Ominami en Magallanes. Nos sumamos al trabajo y solicitamos con claridad al interior del comando que fuéramos estrictamente rigurosos. Sin embargo, nada de esto ha ocurrido”, puntualizó.
Según Ramos, “un pequeño grupo de antiguos dirigentes de la Concertación, literalmente, se tomaron el comando; y sin mediar acto democrático alguno, se han apropiado de la conducción de la campaña, instalando las mismas prácticas y estilos que tanto hemos criticado: “blindar al candidato”, “esconder la pelota”, “tráfico de influencias”, “equipos apernados”  y “operadores en las sombras”, son sólo algunas de las malas prácticas, que poco a poco han ido nublando y opacando la alternativa que hemos intentado construir”.
Además, como si fuera poco y para que muchos sigan sin entender muchas cosas que sólo pasan por la mente del dirigente del PPD, tiró sus dardos contra los candidatos del PH, Jelincic y Burgos, e ironizando con sus expectativas de llegar al Parlamento y señaló que “a puertas cerradas y sin la más mínima consulta, este pequeño grupo de dirigentes decidió que Jaime Jelincic y Luis Burgos sean las caras del cambio y la renovación. Seremi de Transportes; seremi de Gobierno; gobernador; intendente y ahora candidato a diputado ¿En qué tipo de renovación estarán pensando? Los militantes y dirigentes del PPD que hemos participado del comando de Marco, nos preguntamos ¿Por qué Jaime no encabezó la renovación de la Concertación cuando fue primera autoridad regional? Si no lo hizo antes, ¿por qué lo va a hacer ahora? Estas candidaturas representan una broma de muy mal gusto para todos los que hemos rechazado el eterno juego de la silla musical y las malas prácticas de la acción política”, culminó.
Nadie entiende nada. La Concertación o aquellos que la noche del 5 de octubre de 1988 descorchaban champaña y se abrazaban, ahora se mandan mensajes y se atacan mutuamente.
la celebración del No terminó siendo una verdadera “bolsa de gatos”.