
La Chevette tradicional tuvo su mejor exponente en el volante Richar Zunini, ya que cruzó la línea de sentencia en primer lugar en la segunda y tercera carrera. Luis Olivares ocupó el segundo peldaño del podio confirmando su evolución mecánica y buen manejo, lo que le valió ganar la primera manga de la competitiva divisional. Alberto Solo de Zaldivar fue tercero, posición que ocupó en las tres carreras y que no estuvo ajena del acosó de las demás unidades, por lo que debió soportar gran presión.