La baja del precio de esta divisa tiene dos caras, por un lado perjudica notoriamente al sector exportador, pero por otra, favorece al importador e indirectamente al consumidor, quien puede adquirir mercaderías a un precio más conveniente.
El precio del dólar revirtió ayer su tendencia a la baja y cerró con el mismo precio de la jornada anterior $ 507,20 comprador y
$ 507,70 vendedor. Esta cifra se dio en una sesión marcada por la incertidumbre que genera la reunión del Consejo del Banco Central, donde  podría hacerse algún anuncio sobre el tipo de cambio, luego de que variados sectores pidieran una intervención de la institución.
A esto se suma las declaraciones del presidente de la entidad, José De Gregorio, en pleno periodo de silencio, en la que explicó que el sistema de libre flotación que defiende podría ser intervenido en casos excepcionales.
El martes el dólar descendió por quinta sesión consecutiva, acumulando una caída de $ 134 en lo que va de 2009, mientras que a lo largo de octubre, la divisa estadounidense acumuló un descenso de
$ 19, mientras que en lo que va de noviembre ha caído cerca de $ 23.