
El fuego consumió completamente las dependencias del local que dejó de funcionar hace bastantes años y que era frecuentado por personas que llegaban a dormir y beber. Incluso las llamas y la extensa columna de humo, visible a lo lejos, hizo pensar en algún momento que la emergencia afectaba el centro de reclusión de menores, ubicado muy cercanamente.
El segundo comandante del Cuerpo de Bomberos, Pedro Alvarado, informó que cuatro compañías trabajaron en el control del siniestro. Las causas aún se desconocen pero no se descarta intencionalidad, ya que era un local que tenía cortado todos los suministros básicos, “así que es probable que gente que pasó por el lugar haya podido realizar una fogata”. La falta de agua fue el principal problema, asi que posteriormente sacaron agua de un grifo ubicado en la cárcel de menores.