
En el marco de la investigación que inició la fiscalía de Porvenir, a partir de la denuncia que interpuso el alcalde de Timaukel Atilio Gallardo, pidiendo que se aclare el destino de 9 millones 726 mil 744 pesos durante la administración anterior, funcionarios de la Brigada de Delitos Económicos de la Policía de Investigaciones (PDI) se constituyeron en el municipio de Timaukel.
La diligencia incluyó la toma de declaraciones a tres personas: la jefa de Finanzas, Giselle Morales, Manuel Hernández, quien actuó como alcalde subrogante, además del propio jefe comunal en ejercicio. Incluso, la policía incautó documentación del período 1998 a 2008.
Malversación
Gallardo explicó que la denuncia nace a partir de su asunción como alcalde y la Contraloría le informa que la contabilidad del año 2008 no había sido presentada al organismo. Esto lo informó al concejo y solicitó a la Contraloría una auditoría, labor que concluyó en octubre y donde quedó al descubierto que faltaban alrededor de $10 millones en las arcas municipales, solamente en el ejercicio contable del año pasado.
Esto llevó al jefe comunal a interponer la denuncia por el presunto delito y la fiscalía de Porvenir procedió a abrir una causa por “malversación de caudales públicos”. Gallardo indicó que la próxima semana deberá concurrir a la fiscalía porque le solicitaron nuevos antecedentes. “Lo único que espero es que la justicia aclare lo sucedido y determine la responsabilidad de quien corresponda”.