Los días previos a la Navidad suelen ser un verdadero caos para quienes por motivos de tiempo o trabajo realizan la compra de regalos a último minuto. Preocupados por salir del paso rápidamente adquiriendo cualquier “engañito”, o bien, conscientes de la necesidad de ahorrar y guardar unos pesos en la billetera que este año ha sufrido los efectos negativos de la crisis económica mundial, algunas personas buscan las alternativas más convenientes, mientras que otros no reparan en gastos, “encalillándose” por muchos meses. Todo esto, sin tomar la precaución de verificar el estado en que se encuentra el producto o asegurarse de que la calidad de éste sea la adecuada.
Por ello, lo que suele suceder es que el artículo regalado o adquirido para uso familiar o personal, tenga una falla de fábrica o el comprador lo haya cancelado sin darse cuenta de que el producto se encontraba deteriorado. Para evitar ésta u otras molestas situaciones, el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) se encuentra trabajando en el desarrollo de una campaña que se difundirá por todo el país y que se enfocará en promover los alcances de la ley respecto de las garantías con las que cuentan los habitantes.
Sin que existan montos mínimos a la hora de exigir este derecho cuando se debe reclamar o cambiar un bien obtenido en el comercio establecido, la normativa legal existente en el país sólo especifica que todos los productos nuevos están sujetos a poder ser devueltos en un plazo de tres meses. “Son 90 días a partir de la fecha de compra”, asegura la directora regional del Sernac, Pamela Ramírez, quien agregó en Pingüino Radio que dentro de las acciones permitidas también se encuentra la posibilidad de exigir la devolución del dinero o la reparación gratuita del producto en caso de que presente fallas. “No queremos pasar desde el encanto de la compra al desencanto de encontrarnos con un artículo que no funciona”, dijo Ramírez.
Las soluciones para evitar que este tipo de hechos afecten a las familias, son varias. Una de ellas, según lo expuesto por la representante de la entidad en Magallanes, consiste en hacer un esfuerzo por planificar las compras de fin de año, lo que puede lograrse destinando un determinado presupuesto solamente para los regalos de los amigos y parientes, con el objetivo de “no involucrarse en gastos que a futuro pudieran provocar un problema”.
En tanto, cuando la garantía a la que tiene derecho todo consumidor no se respeta, el cliente está en todo su derecho a hacer el reclamo correspondiente en la institución, la cual opera haciendo la mediación correspondiente y, más tarde, solicita a la empresa cumplir con la acción que por ley debe ejercer. Pero antes debe asegurarse de contar la boleta que recibió en la casa comercial donde efectuó la compra, ya que es el único documento que le permitirá validar la acción realizada.
Pero las responsabilidades no sólo las tienen quienes pagan por el servicio, sino que también aquellos que lo entregan y por eso la representante local del Sernac hizo un llamado especial al sector comercial. “Esperamos que las empresas regionales y las nacionales con presencia en Magallanes sean lo suficientemente profesionales como para ofrecer los productos con el servicio de post venta que nosotros esperamos como clientes”, manifestó.
Para explicar en qué consiste esto, detalló que aquel proceso sólo es parte de una simple acción, y es que al momento que una persona solicite cambiar lo que adquirió, ello pueda ser posible sin mayores inconvenientes.