Para la pesca artesanal y principalmente para los dueños de embarcaciones menores en Magallanes, el 2008 fue un año en que los efectos de las constantes alzas de los combustibles e insumos, y las inclemencias climáticas perjudicaron económicamente de extrema gravedad y arrastran a este importante sector de la producción a una crisis de incalculables consecuencias.El dirigente de los armadores dueños de embarcaciones menores, José Hernández, dijo que tienen puesta su esperanza en las conversaciones que llevan las organizaciones del sector con las autoridades económicas, tanto en lo nacional como en lo regional, sin perjuicio de ello “nos parece importante que las peticiones realizadas sean respondidas con prontitud y de acuerdo con las necesidades más urgentes”.
