Pese a que el abogado defensor, Leonardo Vallejos, se opuso a que su cliente, el guardia de seguridad Sebastián Rosas Maldonado fuera enviado a prisión, terminó imponiéndose la postura del fiscal Eugenio Campos que justificó su petición en atención a que la libertad de esta persona constituye,...  después del grave hecho de sangre que protagonizó el fin de semana, un peligro para la sociedad.
Así lo entendió el juez Jaime Álvarez tras escuchar los antecedentes que recopiló el fiscal como la declaración de varios testigos de la agresión, incluida la versión de los amigos que la madrugada del sábado acompañaban al imputado.
En este episodio la peor parte la sacó Carlos Emerson Regueiro Mancilla, estudiante de 23 años, quien inicialmente fue erróneamente sindicado como guardia y que en estos momentos se recupera satisfactoriamente internado en la Clínica Magallanes.
Ayer, en la audiencia de control de detención, el fiscal Campos expuso que en la madrugada del domingo 24 la víctima, Regueiro Mancilla se encontraba al interior de la disco Roxi (Bories 546), cuando se produjo un altercado entre varias personas, incluido el guardia Rosas, quien las emprendió a patadas y golpes de puño en contra del estudiante. No contento con ello sacó un cuchillo que andaba trayendo escondido “con el cual procedió a dar diversas puñaladas a la víctima”.
Luego, el mismo imputado, avanzó por calle Bories y al llegar a Croacia alcanzó a Rodrigo Contreras Arriagada con quien discutió y también lo acuchilló causándole lesiones menos graves.
Lo que se desprende de las declaraciones que entregaron testigos al fiscal, la agresión surgió porque en la disco había una joven que antes fue pareja de un amigo de Sebastián Rosas y ahora compartía con uno de los jóvenes que terminó agredido de gravedad por el guardia.
Esta persona fue formalizada por dos delitos: “Homicidio simple en grado de frustrado” y “lesiones menos graves en grado de consumado”.