
Willinger y Mathis dieron a conocer detalles de la educación pública francesa, que a diferencia de Chile, educa al 90% de los estudiantes. En ese lugar la matricula a los establecimientos es absolutamente gratuita en el nivel básico, media y universitario.
Barrientos explicó que en esa ciudad existe una política para la primera infancia que apunta a apoyar la maternidad, conciliar la vida laboral y familiar y una constante lucha contra la desigualdad.
Además, detalló que respecto a la primera infancia existen dos sistemas de cuidado infantil: las asistentes maternales, alrededor de 1.000 mujeres en Estrasburgo, que acogen a niños en sus hogares, con una cobertura aproximada de 2.500 niños, es decir, dos a tres niños máximo por cada cuidadora, y un tipo de acogida colectiva, guarderías diurnas, donde existe una cobertura para alrededor de 3.100 niños.
El sistema de educación más frecuentado es el público, donde los municipios sólo se encargan de la mantención de los establecimientos hasta quinto básico, y de contratar a los asistentes de la educación.