El siniestro que ayer en la madrugada devastó una vivienda de dos pisos en calle Arauco, entre Mejicana y República, revivió el temor del vecindario porque es la segunda casa deshabitada que incendian en un mes. Sin contar un tercer episodio que hace mucho tiempo sufrió el conocido Teodoro Martinic, a quien le quemaron una casa rodante, en el cuadrante donde se produjo este hecho.
A solicitud del fiscal de turno, y producto de la misma inquietud que ronda en la gente, ayer en la mañana peritos de Labocar de Carabineros realizaron varios peritajes, los que formarán parte de la investigación que se inició por este nuevo incendio. Lo propio hicieron peritos del Cuerpo de Bomberos, con Raúl Carrillo a la cabeza.
Vecinos preocupados
Las personas que colindan con la vivienda siniestrada, en Arauco 530, manifestaron a Diario El Pingüino su preocupación por lo que está sucediendo. Le temen a la gente que anda cometiendo actos vandálicos, “porque estamos frente a verdaderos pirómanos”, dijo un antiguo poblador.
Francisco Vera Aedo, vecino del inmueble incendiado, aportó como antecedente que la semana pasada escuchó música que provenía desde el interior del caserío de dos pisos. Lo que no sabe es si los jóvenes que ingresaron son familia del propietario o era gente desconocida que aprovechó el estado de abandono del inmueble.
“Mano dura”
Teodoro Martinic calificó lo sucedido ayer como “una maldad de proporciones”. No encuentra otro vocablo más decente para llamar a este tipo de actos vandálicos, “porque este fue un incendio intencional”. En este mismo tenor recordó que hace menos de un mes los “pirómanos” quemaron la casa que por años ocuparon los jefe de zona de Carabineros, en República esquina Arauco, a pasos de la vivienda siniestrada ayer.
“O sea, cualquier propiedad que esté sin moradores, vienen estos indeseables y le prenden fuego. Creo que falta mano dura”, señaló Martinic, quien en dos oportunidades anteriores fue víctima de vandalismo. Hace tres años le quemaron una casa rodante y el año pasado un camión. Por eso tiene razones de sobra para estar molesto, más aún cuando nunca encontraron a los culpables.
Luis Agurto, otro vecino del sector, comentó que hechos como éstos los cometen jóvenes que circulan a altas horas de la noche y luego ingresan a las casas desocupadas y las queman.
“Mi señora vio cuando un joven saltó las rejas, dio la vuelta por la parte posterior de la casa y a los treinta minutos la casa estaba envuelta en llamas”, comentó.
Respecto a la vivienda de Carabineros recordó que tres jóvenes andaban preguntando por la casa desocupada y al día siguiente apareció quemada.
A propósito de lo mismo, algunas personas manifestaron su preocupación por las latas sueltas que quedaron en el techo de la ex residencia de los generales, de la policía uniformada, con posterioridad al siniestro, porque el temporal de viento las mueve con mucha peligrosidad.