En contacto con Diario El Pingüino, Jaime Prohens lamentó mucho no haber podido participar en la carrera. A pesar de todos los esfuerzos por hidratarlo y mejorar su estado general, una gastroenterítis (la maldición del cordero) le impidió subirse a la moto el domingo. Sin embargo, no quiso dejar pasar la oportunidad de agradecer las atenciones y el cariño recibidos en esta visita.
Su hermano Felipe manifestó estar, “sorprendido por la organización de la Asociación de Motociclismo de Punta Arenas (Ampa). Es un campeonato muy consolidado y deberían hacer el esfuerzo de proyectar algunos buenos pilotos y tratar de llevarlos a correr fuera de la región”. Consultado sobre cuál de los rivales le llamó la atención, indicó: “Los tres punteros eran muy rápidos (Pablo Paredes, Gonzalo Escárate y Javier Paineñanco), se vieron veloces en las pruebas del sábado. Especial mención para los pilotos de la categoría Open, Rodrigo Mancilla y Danilo Guic, que en mi opinión son absolutamente proyectables”. Salvo algunos problemas de concentración de Guic, los consideró rápidos y talentosos.
Respecto a su carrera sostuvo: “Tuve algunos problemas con el combustible en la 4ª vuelta y eso me obligó a sacrificar varios minutos, luego, en el último giro, volví a tener problemas de combustible y eso marcó el resultado”.
Fuera de lo competitivo destacó la atención de parte del municipio, su fascinación por haber corrido en un terreno virgen y haber disfrutado correr bajo el granizo por primera vez.
Su recomendación final: “Deben bajarle la velocidad a la carrera”. Y su compromiso: “Jaime y yo vamos a volver el 2011”.