
Posterior a un viaje de perfeccionamiento a Italia y París el año 2000, Héctor se instaló con la peluquería Stylos ubicada en Armando Sanhueza 1168, en donde todos estos años han circulado cientos de magallánicos que confían su cabello en las manos del estilista.
“Lo que busco a la hora de realizar un corte de cabello es que la persona encuentre una innovación, que la haga sentirse satisfecha, las personas se entregan a mis manos y no los defraudo”, señala Contalba, quien ha participado en un sinnúmero de eventos y actividades, en las que ha puesto sus servicios a la orden de los clientes, entre las que destacan, jornadas por el Niño Impedido Magallánico, Película “Tierra del Fuego” de Miguel Littin y desfiles de modas, entre otros.
Nivel magallánico
De un tiempo a esta parte, el mundo de los salones de belleza ha aumentado en gran forma, abriéndose el mercado en la región. “El nivel de peluqueros en Magallanes es muy bueno, y eso significa que siempre hay que estar capacitándose y aprendiendo, para poder mantener el buen nivel”, enfatizó Contalba, quien agregó que los precios por atención en la región son relativamente accesibles, ya que no hay comparación con los precios que se manejan en la zona central del país: “Cortarse o arreglarse el cabello en Punta Arenas tiene un valor mucho más bajo que en otros lados”, enfatiza Héctor, quien cree que esto se puede explicar porque el mercado en la región es amplio y eso permite que haya precios para todos.
El estilista, de 46 años, afirmó que su objetivo a la hora de atender a la clientela femenina es lograr que el mismo corte de pelo con que sale de la peluquería, lo tenga permanentemente, es decir, que no haya la necesidad de “retoques”, simplemente que el trabajo que realice perdure en el tiempo.
“Gemelos”
No sólo de trabajo vive el hombre. Bien lo sabe Héctor, que con más de seis años de pareja junto a Pamela, es orgulloso padre de Máximo y Gerónimo, gemelos de un año y dos meses de vida, que actualmente son el orgullo de este profesional, que divide su tiempo, como el mismo lo indica, entre el cuidado y “regaloneo” con sus pequeños y atendiendo su salón de belleza, en el que diariamente transitan niños, jóvenes, mujeres y adultos, que acuden a él, generalmente con la convicción de que en sus manos se encuentra la solución a algún cambio radical, o simplemente para continuar con algún estilo de corte o peinado, trabajo que según las palabras del estilista asegura de antemano. “Los invito a acercarse a mi salón de belleza, y les prometo que no se arrepentirán”, finalizó Contalbo.