El plan de la Corporación Municipal de Punta Arenas de desvincular a 50 profesores y casi la misma cantidad de asistentes de la educación para hacer más sustentable el sistema educacional de la comuna, no cayó nada bien en el Colegio de Profesores.
Especialmente, porque en los últimos meses se han conocido gastos de la entidad que no se condicen, precisamente, con la estrechez económica que está atravesando.
“La mala gestión de su secretario interino, Hermes Hein, ha hecho que se despilfarre mucho dinero y ahora su solución es despedir gente. Eso no corresponde en ningún caso”, expresó el presidente regional del Magisterio, Julián Mancilla.
Para el dirigente lo que se debería hacer es pedir más recursos para evitar estas desvinculaciones, puesto que los más perjudicados con esta medida son los niños, quienes tendrán que dejar de asistir a las clases extraprogramáticas y de reforzamiento.
“Las actividades de apoyo son importantísimas para el proceso de aprendizaje de los alumnos y si se realizan los despidos nadie las podrá realizar”, afirmó Mancilla.
Para evitar que finalmente los 50 docentes y los 55 asistentes de la educación deban dejar sus trabajos, el dirigente llamó al alcalde de la comuna, Vladimiro Mimica, y al Concejo Municipal a que se reúnan con ellos para lograr un acuerdo que no sea tan perjudicial.
“Esto demuestra que para las horas de los niños no hay plata, pero para otras cosas sí”, puntualizó el presidente regional.