Actualmente, en el país, en materia de grifos contra incendios, existen diversas disposiciones legales y reglamentarias que norman dicho tema, tanto en lo que se refiere a su instalación como en cuanto a los requisitos técnicos y de operación de los mismos. dentro de las cuales principalmente encontramos el Reglamento de la Ley General de Servicios Sanitarios y La Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones, que regulan en todos los ámbitos el uso y mantención de los grifos.
De esta forma, según esta normativa existen dos clases de grifos, los ubicados en la vía pública y los de uso particular. El primer tipo, que corresponde al caso urbano, forma parte integral de la red de distribución de agua potable, cuya mantención es de responsabilidad de la respectiva empresa distribuidora; en este caso, a la empresa que le compete dicha función es a Aguas Magallanes.
Según el gerente regional de la empresa sanitaria, Iván Plencovich, el actuar de los tres jóvenes que abrieron 33 grifos el fin de semana en el centro de la capital regional “corresponde a un acto vandálico, que constituye un grave peligro para la sociedad, por la baja presión que se origina al dar el paso de agua en tal cantidad de dispensadores, los que generalmente son usados en caso de emergencia por bomberos”.
En la ciudad hay aproximadamente 800 grifos operativos, los cuales son periódicamente sondeados, para revisar su funcionalidad; sin embargo, el actuar de personas irresponsables que hacen uso no autorizado de la red de agua potable, interfiriendo en lo sistemas de corte, tapas y llaves que utilizan dichos elementos, dificultan la labor de la empresa a cargo, como también del personal del Cuerpo de Bomberos.
Se estima, según apreciaciones de Plencovich, que un grifo, con todo lo que involucra su correcta instalación y uso, asciende al valor aproximado de
$ 300 mil, por lo que nuevamente hace referencia a la conciencia social indicando que “éste es un elemento que ayuda a toda la comunidad, por lo tanto, todos deben cuidarlos”.
Por su parte, el primer comandante de Bomberos de la capital magallánica, Pedro Alvarado, nuevamente hizo sus descargos contra este tipo de situaciones señalando que “este tipo de elementos nos ayudan mucho en las emergencias. Hago un llamado a la comunidad a controlar y cuidar estos recursos hídricos, así como al mismo tiempo llamar a denunciar actos irregulares con respecto al mal uso de las redes de agua potable”.
A su vez, la normas sobre incendios destacan que todo lugar público con capacidad para más de mil personas, debe contar con un grifo de agua contra incendio, conectado a la red pública y accesible al Cuerpo de Bomberos, así como también, deben ubicarse en la vía pública, con un fácil acceso y con su correspondiente señalización.