La efervescencia del público se puede sentir, entran a escena Felipe  Camiroaga, esta vez sin corbata y una guapa Soledad Onetto que enfundada en un preciosos vestido azul que moldea su figura, comienzan a “calentar” al público que impaciente esperaba la presencia de Américo. Con el objetivo de darle tiempo a la producción de armar el escenario para Américo, la dupla de animadores continúa saludando a los asistentes, hasta que la tensión no aguantó más. A las 22.20 horas el fenomeno de la música tropical entra en escena, comienzan a sonar las melodías del popular artista, y el griterío en la Quinta Vegara es infernal, un gran juego de luces y humo son la antesala de lo que se viene,... Américo apareció en el escenario vestido de impecable traje blanco e interpretando “Te vas”, generando una fiesta masiva en el anfiteatro de la ciudad jardín. El reconocido artista realizó un recorrido musical por sus más exitosos temas, que a estas alturas son casi todos, “Entre el amor y odio”, “A llorar a otra parte”, “Solo” entre otras fueron las melodías que hicieron cantar a rabiar al monstruo de la Quinta, que a esas alturas, como una suerte de hipnotismo, estaba entregado a los pies de Domingo Américo.
En poco más de media hora de actuación el respetable ya comienza a pedir la antorcha de plata, anticipando lo que se venía por delante, “Me enamoré de ti y qué”, con dedicación especial del artista a las mujeres presentes fue la gota que rebalso el vaso, para que ya comiencen a ser insistentes los requerimientos de antorchas para el cantante nacional. Posteriormente a interpretar “Traicionera”, que fue coreada completamente por el público, llegó la antorcha de plata para Américo, que no alcanzo ni a disfrutar, ya que en minutos llega la antorcha de oro, hecho que el artista agradece a su fanaticada: “Han cumplido todos mis sueños, muchas gracias”, fueron las palabras con que agradeció los estimulos, que no pararon ahí porque en adelante el público no se cansó de pedir más premios, hasta que consiguieron su objetivo. Se suman dos preseas más, ni más ni menos que dos gaviotas, hecho que lo catapulta por lejos como el artista del Festival, transcurridas cuatro noches.
Después de una hora de actuación, el público de la Quinta Vergara, a regaña dientes, dejó irse al ariqueño, tras cantar nuevamente “Te vas”, sellando una notable presentación en la ciudad jardín.