Concepción se ha convertido desde el sábado en una ciudad sin ley, donde el miedo y la impotencia ha llevado a sus vecinos, que hace más de 30 horas están sin luz, agua ni alimentos, a lanzarse a la calle en busca de suministros básicos. Un supermercado de la cadena Lider, controlada por la estadounidense Wall Mart, fue invadido ayer por cientos de pobladores desesperados por la falta de agua y víveres, aunque muchos aprovecharon para robar artículos electrodomésticos y televisores.
La alcaldesa Jacqueline Van Rysselberghe, exigió al gobierno el envío de militares a la zona para restablecer el orden. “Se necesitan marinos y militares en las calles, porque hay caos”, afirmó la autoridad comunal.
En tanto que en Talcahuano, más de un millar de personas saqueaba los contenedores de los barcos y las bodegas del mercado central.
Estado de Excepción
Tras sostener una larga reunión de coordinación con el Comité de Emergencia, la Presidenta de la República, Michelle Bachelet, informó ayer que le pidió al ministro del Interior (Edmundo Pérez-Yoma) y Defensa (Francisco Vidal) firmar el Estado de Catástrofe para las regiones del Maule y Biobío, lo que permitirá, entre otras cosas, desplegar a las Fuerzas Armadas en las calles y declarar toque de queda. Esto tendrá una extensión de 30 días. “Estamos ante una emergencia sin parangón en la historia de Chile”, señaló la Mandataria.
Según el artículo 41 de la Constitución Política con esta condición se pretende garantizar el orden público en las zonas más afectadas por el terremoto. La declaración de Estado de Excepción constitucional faculta a la Mandataria con ciertas atribuciones especiales y excepcionales para hacer frente a la situación de emergencia.
La Presidenta de la República podrá restringir el ejercicio de la libertad de locomoción y del derecho de reunión. El Ejecutivo podrá restringir la circulación de las personas y el transporte de mercaderías, y las libertades de trabajo, de información y de opinión, y de reunión.
Asimismo, podrá disponer requisiciones de bienes y establecer limitaciones al ejercicio del derecho de propiedad y adoptar todas las medidas extraordinarias de carácter administrativo que estime necesarias. Declarado el estado de emergencia o de catástrofe, las zonas respectivas quedaron bajo dependencia inmediata de los generales Guillermo Ramírez y Rosco Pesse que asumirán las jefaturas de plaza en las regiones de Biobío y Maule, respectivamente, en coordinación con los intendentes.
Medidas inmediatas
La Presidenta además detalló las medidas inmediatas que se tomarán para enfrentar la catástrofe. Respecto del desabastecimiento de alimentos señaló que se coordinaron con las cadenas de supermercados para que entreguen gratuitamente los enseres básicos y de primera necesidad a la población.
Sobre el restablecimiento de los servicios básicos, Bachelet señaló que la distribución de electricidad es el mayor problema que enfrenta el país en estos momentos y aclaró que se le está exigiendo a las empresas que hagan su mayor esfuerzo para restablecer la electricidad en todo el país a la brevedad.
En cuanto a los hospitales, indicó que se han instalado ya algunos de campaña “en los lugares donde los hospitales no están operativos” y precisó que el gobierno está dispuesto a “comprar servicios a la red privada que esté en disponibilidad de darlos en las zonas más afectadas”.
Finalmente, la Jefa de Estado hizo un llamado a las empresas y a la sociedad civil a ponerse a disposición del país para enfrentar estos momentos de extrema gravedad.