
De acuerdo al Servicio Sismológico de Estados Unidos, fueron dos sismos consecutivos que en la escala Richter alcanzaron los 5,9 y 6,0 grados, provocando un gran temor en la población, que fue advertida por Bomberos de Talcahuano de un posible tsunami. El miedo llevó a las personas a arrancar hacia los cerros. Sin embargo, la Onemi explicó que "las características del sismo no reúnen las condiciones necesarias para generar un tsunami en las costas de Chile".