
De acuerdo a lo informado por el doctor Jorge Bardisa, de las cinco mil llamadas que reciben al año el cinco por ciento, solo es de verdadera urgencia, el 80% es de enfermos leves mirado desde el punto de vista de una urgencia.
Otro porcentaje pertenece a pacientes de tercera edad algunos postrados que no tienen otros medios para acceder al sistema de salud que no sea a través del Samu y están dentro de las urgencias leves.
En muchos casos llaman al 131 para insultarlos por las demoras y en otros casos dejan tomada la línea, obstaculizando una verdadera emergencia que se pueda estar generando, cabe mencionar que existe un protocolo de salida, que da la prioridad a la emergencia, de acuerdo a los antecedentes recabados se despacha un móvil básico o el de avanzada que atiende las patologías graves, estos móviles tienen diferencias en los equipamientos internos y el personal que llevan a bordo.
Samu tiene el fin de semana dos móviles, aun cuando la ciudad tiene otros sistemas de urgencia que existen en la red comunal, provincial y comunal, se cuenta con doce ambulancias Samu en la región, además de los privados que tienen ambulancias para sus beneficiarios, lo mismo pasa con el hospital de las Fuerzas Armadas.