
La confirmación del máximo tribunal del país le impide al profesional ejercer las funciones de notario, aunque el abogado del jurista, Cristián Opazo, apelará a la última instancia que le queda: El Presidente de la República.
La máxima sanción nace a partir de la denuncia de una funcionaria de su notaría por una agresión física, ocurrida el 8 de enero del año pasado. Además, esta no era la primera vez que la Corte de Apelaciones abordaba una denuncia en contra del notario.
En esta oportunidad lo suspendieron por tres meses de sus funciones y le impusieron el traslado a otra región del país. Vergara decidió presentar una apelación a la Corte Suprema. El máximo tribunal del país elevó a cuatro meses la suspensión del cargo. Y aunque no dio lugar al traslado, sí ordenó abrir un cuaderno de remoción, lo que algunos entendieron como el encendido de la luz verde para sacarlo del cargo.
Diez a siete
Vergara se contactó con el abogado Cristián Opazo y le pidió que preparara un recurso de apelación a la Corte Suprema. El profesional viajó personalmente a Santiago a “alegar” la presentación. Pero, por diez votos a siete, los ministros mantuvieron la remoción del notario.
Consultado por la decisión judicial, Opazo reflexionó que se trató de un fallo en el cual no participaron todos los ministros de la Corte Suprema y que “siete estuvieron por no aplicar la remoción a mi representado, entre ellos Dolmetch, Kunsmüller, Ballesteros y Maggi”.
Como defensa en los alegatos, planteó el hecho de que “en el caso en cuestión existiría una doble sanción, y que la remoción como tal, orgánicamente sólo se podría desprender de una presunción de mala conducta funcionaria, esto es, que mi cliente hubiese sido sancionado más de tres veces en el lapso de tres años, supuesto que en el hecho no se ha dado”.
Anunció que están estudiando los pasos a seguir, “ya que la decisión final la debe adoptar el Presidente de la República y mientras ello no suceda en la situación se mantiene status quo”.