
El 10 de septiembre de 2009, Benjamín Soto Andrade huyó cuando personal de la Policía de Investigaciones, que realizaba un servicio preventivo en la avenida Eduardo Frei, lo conminó a detenerse al llamarle la atención que el conductor guiara sin placa patente y con evidencias de hacerlo en estado de ebriedad.
Ese día andaba a cargo del procedimiento el subcomisario Ricardo Mathías, quien al solicitarle que se detuviera, el conductor los impactó con el vehículo por la parte posterior y luego se dio a la fuga pasando a subirse a toda velocidad por avenida Salvador Allende en contra del tránsito hasta llegar a la avenida Brasil donde el conductor perdió el control del vehículo y terminó impactando en contra de un muro y un poste de luz de Edelmag.
El joven conductor aceptó el procedimiento abreviado que ofreció el fiscal Felipe Aguirre y, con ello, admitió su responsabilidad en el accidente y fue condenado en el momento por el magistrado Juan Olivares.