Desde la intendencia afirmaron que todo la disminución de recursos se efectuó con apego a la ley. No obstante, la core Nancy Dittmar (PS) señaló que no se debieron reducir los dineros del Fondema, y el consejero José Barría (RN) dijo que “tenemos que pedir que se recalendarice la entrega”.El recorte presupuestario que realizó el gobierno central para reunir fondos en ayuda a las zonas afectadas por el terremoto y posterior tsunami del 27 de febrero, sigue generando malestar en los políticos de la región, ya que con el paso del tiempo se han producido nuevas dudas respecto del verdadero recorte que afectó la zona.
Esta vez fue la consejera Nancy Dittmar (PS) quien hizo públicos sus reparos a la medida, criticando especialmente que se haya tocado los dineros del Fondo Desarrollo Magallanes (Fondema).
“El Fondema no debió ser reducido, porque no es homologable al Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR). Ni siquiera se incluye cuando se hace la evaluación de eficiencia en la gestión”, afirmó la integrante del Consejo Regional (Core).
Según sus cálculos, el gobierno recortó alrededor de $ 189 millones de esa línea de financiamiento. Pero esto no es lo único que molesta a Dittmar, puesto que considera que “hay otros fondos donde se pueden obtener recursos. Al final quitarle dinero a las regiones hace que éstas también se vean perjudicadas, y todo esto no tiene que ver con ser solidarios o no. Creo que las decisiones no fueron las acertadas y se entregó una pésima señal política”, agregó la consejera.
Los dos hechos anteriores gatillarían un alza en la cesantía, ya que como lo explicó la intendenta Liliana Kusanovic, habrán proyectos que se deberán aplazar.
“En esta región extrema, la mayor cantidad de empleo lo otorga el Estado a través de programas sociales, de construcción, entre varios otros. Entonces tendremos que ajustarnos a costa de que la gente se quede sin trabajo”, sentenció Dittmar.
Contrariamente a su postura, el consejero José Barría (RN) indicó que la norma que regula el Fondema y el FNDR es la misma, por lo que no habría ninguna irregularidad en el reajuste que efectuó el gobierno.
Además, enfatizó en que “no debemos llorar sobre la leche derramada, ahora tenemos que pedir que se recalendarice la entrega de los recursos que nos han restado”, agregó Barría.
