
Su diagnóstico es muy delicado. Según informó el médico de turno, Juan Aguilar, el hombre sigue muy grave, con un edema cerebral, sedado y conectado a un ventilador mecánico que le mantiene los signos vitales estables.
Su estado se debe a que el proyectil, en términos clínicos, una entró y salió de parietal a parietal, es decir, atravesó su cabeza. El impacto, por ende, le provocó una considerable pérdida de masa encefálica, por lo que se encuentran trabajando en un drenaje para que su actividad craneana llegue a normalizarse.
No obstante, el doctor Aguilar señaló que de salir de la gravedad Velásquez quedará con un daño neurológico muy grande.