
El documento legal, elaborado por la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC), fue promulgado por el Ministerio de Economía, en uno de los últimos trabajos en conjunto, ya que actualmente la SEC depende del Ministerio de Energía.
El texto legal involucra una serie de cambios, entre los cuales figura que las empresas de gas deben contar con un Sistema de Gestión de Integridad de Redes (SGIR). Esto significa que las empresas de transporte y distribución de gas de red deben mejorar sus procedimientos internos, de tal forma de gestionar los riesgos propios de sus redes y aquellos externos que las pueden afectar, identificando los puntos más riesgosos dentro de sus instalaciones. Además, contempla requisitos que las empresas deben cumplir, como considerar aspectos de criterios de diseño sísmico, con el fin de prevenir que, ante algún movimiento telúrico de magnitud, se produzcan fugas de gas que puedan ocasionar algún accidente de proporciones que ponga en peligro a las personas y cosas.