
El 26 de noviembre, la pequeña de 12 años, Katherine Delgado San Martín, caminaba en dirección al colegio, acompañada de su amiga Katherine Barría Aguilar, cuando fueron atropelladas violentamente por el conductor Américo Fernando Masías Andrade. El accidente ocurrió en Pedro Aguirre Cerda esquina Zenteno, a pasos del colegio, cuando cruzaban por el paso de cebra. En una situación que suele suceder, un autobús detuvo su marcha para que las alumnas cruzaran, pero por la otra vía lo hacía el conductor de un vehículo deportivo quien no tuvo el mismo cuidado.
Katherine Delgado, la segunda de cuatro hermanos, sufrió lesiones muy graves ya que golpeó violentamente su cabeza contra el parabrisas del auto. Fue llevada de urgencia al hospital regional donde la operaron y permaneció bastante tiempo internada en recuperación. El complejo cuadro médico estaba dado por el golpe craneano, cortes faciales y una contusión en la cadera.
Producto de este accidente la amiga, Katherine Barría, resultó con lesiones menos graves.
Suspensión
El 26 de marzo se acordó una nueva audiencia, celebrada ayer, donde el fiscal Eugenio Campos planteó al imputado una salida alternativa, mediante una suspensión condicional del procedimiento por un año. Las condiciones fueron fijar un domicilio y cancelar tres millones de pesos: dos millones por Katherine Delgado y un millón por Katherine Barría. Por la primera se hizo presente en el Juzgado de Garantía la madre, Yesika San Martín, y por la otra menor el padre, Rodrigo Barría Oyarzún.
Mientras que el imputado llegó al tribunal acompañado de su abogado particular Guillermo Soto. “A los padres que están aquí quiero pedirles disculpas porque nunca fue mi intención atropellarlas y causarles daño”, indicó, aún muy afectado, el conductor Américo Masías.
Fiscal
La investigación judicial terminó en un requerimiento simplificado, por un cuasidelito de lesiones, y ayer se llegó a una suspensión condicional.
Respecto del estado de salud de las niñas, ahora están mucho mejor sin perjuicio de que los padres indicaron que se encuentran en tratamiento sicológico producto de todo el daño que se les causó.
El conductor guiaba en normal estado de temperancia, por eso la investigación fue por un cuasidelito de lesiones, “producto del actuar imprudente en la conducción”.
En su oportunidad, la madre de la estudiante que resultó más gravemente lesionada, Yesika Martín, pidió a las personas ser más responsables en la conducción, a tener mucho cuidado, y no circular tan rápido, “para que a otro no le suceda lo que le ocurrió a mi hija”.