
Como la investigación esperaba dar con otras personas, el fiscal Oliver Rammsy solicitó una ampliación de la detención, y por eso ayer se realizó la audiencia de control, donde Chávez fue formalizado por encontrársele 56 contenedores o “empanadas” de marihuana paraguaya prensada, de un poco más de 100 gramos.
Al final las diligencias del OS-7 de Magallanes terminaron con un detenido por tráfico de drogas y dos detenidos por el delito de microtráfico. Un trabajo de investigación que comenzó el pasado 2 de junio cuando, por antecedentes que manejaban en conjunto con la fiscalía local, detuvieron a Chávez, de 27 años, con residencia en Coquimbo.
Esta persona fue detenida cuando se aprestaba a viajar desde Punta Arenas a Puerto Natales a realizar una entrega de droga. Una vez capturado, el fiscal Oliver Rammsy solicitó la ampliación de la detención, con la finalidad de sustituir la droga incautada por envoltorios con otra sustancia y, de la misma forma, poder realizar una “entrega vigilada” al sujeto que esperaba el cargamento en la capital de Última Esperanza.
Fue así que el día sábado, alrededor de las 13 horas, se concretó esta entrega dirigida y vigilada por los policías del OS-7 en Puerto Natales, donde se detuvo a Claudio Hidalgo Jiménez, de 30 años, en los momentos que recibía los sustitutos de la droga, siendo puesto a disposición del Ministerio Público y del respectivo control de detención. Allá fue formalizado por la fiscal Wendoline Acuña, por el delito de microtráfico.
En diligencias similares la policía logró la detención de otro sujeto que se dedicaba al microtráfico de drogas en pequeñas cantidades en pleno centro de Puerto Natales. El imputado, Germán Pelayo Huerta, de 51 años, es propietario de un local comercial de venta de ropa y además se dedicaba a la venta de drogas.
Personal del OS-7, utilizando la técnica del agente revelador, procedió a efectuar una compra de marihuana, con previa autorización de la fiscal de Puerto Natales, para una vez consumado el hecho proceder a su detención.
Marihuana
En total se incautaron 59 envoltorios, con un peso de 113 gramos de marihuana prensada correspondiente a más de 300 dosis y que en el mercado del narcotráfico tienen un valor cercano al millón de pesos. Además, incautaron cerca de $ 150.000 en dinero en efectivo, tres celulares y una licuadora con la cual el primer imputado molía la droga traída desde el norte del país.
Llamado a la comunidad
Carabineros realizó un llamado a la ciudadanía, “a denunciar estos hechos, que ponen en riesgo la integridad y la salud de las personas, como asimismo la de nuestros hijos”.