Osados delincuentes ingresaron ayer en la madrugada al edificio del Obispado de Punta Arenas, en pleno centro de la ciudad, aunque el destino final era el tercer piso, donde se ubican las oficinas centrales de la empresa de alimentos Sodexho. Para cumplir su cometido rompieron algunas puertas y chapas.
Una de las secretarias, que fue la primera persona en llegar a las 8.30 horas, dijo a Diario El Pingüino que apenas ingresó a las dependencias notó que desconocidos habían estado al interior, porque la puerta metálica estaba forzada. “Seguí avanzando y me pude percatar que había otra oficina con la puerta rota y otras con señales de haber sido abiertas”.
A tan sólo una cuadra de la plaza, los delincuentes no tuvieron miedo de ser descubiertos y, al parecer, esto les permitió cumplir el objetivo, ya que se llevaron dos computadores portátiles (notebooks), un teléfono celular y un televisor LCD.
Aunque este aparato fue recuperado, ya que lo dejaron sobre el techo que da al estacionamiento del obispado. No está claro si fue porque lo olvidaron o si estaban en peligro de ser descubiertos cuando emprendían la huida. Claro que el aparato de televisión quedó inservible porque se les cayó y permaneció en la intemperie toda la noche.
“No sabemos por donde ingresaron, aunque se especula que pudo ser por una ventana”, comentó la funcionaria. Lo que más le extraña es que todo queda muy bien cerrado cuando se retiran del recinto y en la puerta principal hay una reja metálica. Lo que no descartan es que él o los antisociales hayan quedado escondidos en alguna dependencia del obispado. Es difícil pensar que pudieran ingresar por una de las ventanas, porque son muy angostas.
Fiscal Campos
El fiscal de turno, Eugenio Campos Lucero, confirmó ayer que Carabineros lo puso al tanto del robo a Sodexho. A raíz de esto dispuso que personal de Labocar realizara los peritajes y le pidió a personal de la SIP iniciar la investigación.
El jefe de la Primera Comisaría, mayor Hernán Benavides, indicó que se encuentran realizando todas las diligencias posibles para dar con él o los autores de este robo, acorde a las instrucciones que impartió el fiscal.
Robo anterior
A mediados de marzo de 2007, la misma empresa Sodexho fue víctima de un robo de más de 12 millones de pesos, entre dinero y cheques. En esa oportunidad también ingresaron de madrugada “visitando” además las oficinas del Obispado de Punta Arenas.
El jefe de remuneraciones de Sodexho llegó al edificio de calle Fagnano 630, esquina Chiloé, donde ellos arriendan el tercer piso.