Por cuatro delitos de robo cometidos en Punta Arenas, más uno en grado de tentativa, y un robo por sorpresa perpetrado en la ciudad de Porvenir, la fiscal Alejandra Guevara formalizó ayer a Juan Alejandro Ruiz Subiabre, ... detenido el domingo de madrugada por efectivos de la Policía de Investigaciones (PDI) cuando caminaba por avenida Bulnes, a la altura de calle Rómulo Correa.
En un registro de las vestimentas le encontraron un reloj pulsera que había robado desde una vivienda particular. Luego concurrieron a la casa donde tomaba pensión y en el dormitorio escondía un collar con piedras brillantes, cadenas metálicas, diferentes tipos de joyas de oro, relojes, anillos, pulseras, chaquetas y varios tipos de ropa, todo lo cual correspondía a robos perpetrados en mayo, junio, julio y agosto.
La investigación de la Brigada de Robos permitió aclarar varios hechos cometidos por esta persona. Incluso la fiscal dijo que esto no terminaría aquí, ya que se presume la participación de Ruiz en a lo menos otros diez robos.
El pasado 3 de agosto ingresó por la noche (22.40 horas) a una vivienda de calle Chiloé, altura del 2400, sabiendo que los ocupantes no estaban. Para esto rompió un vidrio de una puerta y robar cinco pulseras de oro delgadas, cinco pulseras de oro gruesas, una cámara fotográfica, un reloj, un netbook, especies avaluadas en seis millones de pesos. Cuando el ladrón se retiraba llegaron los dueños de casa, quienes dieron cuenta de lo sucedido a la policía, pero el sujeto alcanzó a huir. Parte de estas especies aparecieron en la pensión del imputado.
El 5 de julio, a las 17 horas, Ruiz ingresó a robar a una vivienda de calle Grumete Bravo, para lo cual pasó desde una vivienda vecina, saltó la pandereta y luego rompió un vidrio. En este lugar robó especies por casi 500 mil pesos.
Después, entre el 22 y 24 de julio, robó en una casa de la población Cardenal Raúl Silva Henríquez. La víctima estaba en Puerto Montt y el antisocial entró rompiendo la ventana de la cocina. Robó joyas, dos parkas Nort Face, licor, un MP3, un MP4, artículos avaluados en un millón y medio de pesos.
La investigación se extiende al 25 de julio cuando entró a un domicilio de calle Gómez Carreño y se llevó una cámara fotográfica, un notebook, un celular, un Play Station Dos y joyas, lo cual fue avaluado en 800 mil pesos aproximadamente.
Casa profesora
Una de las curiosidades de este singular ladrón fue el gesto que tuvo con una ex profesora del colegio. La fiscal Guevara relató que en una ocasión ingresó a robar a una vivienda de calle Grumete Bravo, villa Los Españoles, también rompiendo un vidrio. Lo anecdótico fue que al registrar las dependencias en el comedor encontró una foto y al ver que la imagen correspondía a quien alguna vez fue su profesora, al parecer la recordó con cariño y se retiró del lugar sin llevarse nada.
El imputado redujo muchas de las joyas en locales dedicados a la compraventa de este tipo de artículos de valor, como el local de Mejicana 702, esquina Bories. Al menos en tres ocasiones utilizó los servicios de un guardia-ayuda a quien le pagaba para que figurara en la transacción. Mientras que el notebook lo vendió en un establecimiento de este rubro, pero fue recuperado. En otra joyería, de calle Croacia, también redujo algunas de las joyas.
La fiscalía formalizó al imputado por cuatro delitos de robo en lugar destinado a la habitación, en grado de consumado mediante escalamiento, más un robo en grado de tentativa (la casa de la profesora). “Además, hay varias denuncias que están en proceso de investigación”, anunció la fiscal.
El imputado reconoció a la policía haber ingresado a robar en al menos diez inmuebles y que muchas de las especies las vendió.
Caso Porvenir
Además, Ruiz fue formalizado por un robo por sorpresa en el que habría participado, en agosto del año 2009. En esa ocasión compartía junto a otras dos personas, una de las cuales estaba bebida y le robaron un teléfono celular.
El cúmulo de antecedentes resultó suficiente para que el juez Juan Villa lo enviara a cumplir prisión preventiva, pese a la negativa del abogado defensor, Cristian Opazo.