
El Ministerio de Agricultura valora muy positivamente este tipo de actividades, cuyos propósitos se ajustan cabalmente a los lineamientos y objetivos de la política agrícola que ha definido y está desarrollando la administración del Presidente Sebastián Piñera. Para orientar los cambios necesarios, hemos establecido seis pilares estratégicos como base de la política agrícola nacional: generar las condiciones que mejoren la competitividad de las empresas silvoagropecuarias; fomentar la Investigación, el Desarrollo tecnológico y la Innovación como ejes fundamentales para lograr un crecimiento sostenido; ampliar los mercados externos y mejorar el funcionamiento de los mercados internos; apoyar la sustentabilidad social, laboral y ambiental; impulsar la modernización de la institucionalidad pública silvoagropecuaria, así como establecer un compromiso interministerial con el desarrollo integral del mundo rural, donde los pequeños agricultores son para este Ministerio muy importantes.
La ganadería magallánica tiene una larga tradición que trasciende nuestras fronteras. El cordero magallánico se exporta desde hace décadas, contando con la mayor población ovina (2,2 millones de animales), que corresponden a alrededor del 50% de las existencias nacionales.
Esta región ha continuado su desarrollo, invirtiendo y generando las condiciones para aumentar su producción tanto en el sector ovino como el bovino.
Para el caso del sector ovino, los acuerdos internacionales suscritos por Chile permiten pensar que el sector puede aumentar los volúmenes exportados. En ningún año se ha ocupado la totalidad de la cuota libre de arancel que se dispone en la Unión Europea: de las 6.000 toneladas bajo cuota de carne ovina con que se cuenta, no se ocupa más del 60%. Por otra parte, aún no se ha enviado carne de ovinos a Estados Unidos, mercado donde ingresaría libre de arancel.