El jueves se cumplieron 11 meses de la desaparición del pescador Luis Almonacid Almonacid (41), soltero y oriundo de la Isla Coldita, comuna de Quellón, Chiloé, quien fue visto el 26 de septiembre del año pasado por última vez, en las cercanías del Río Canelo, al norponiente de Punta Arenas.
Por lo mismo, uno de sus hermanos, José, fue ese mismo día hasta el lugar exacto en donde supuestamente está su cadáver (Punta Prat),
para encender un par de velas en su memoria y rezar por el pronto descanso de su alma.
En este ritual fue acompañado por la tarotista y vidente de Pingüino Radio, Mary, a quien recurrió, a principios de este mes, en su desesperación por dar con el paradero del hermano, pero sin obtener resultados positivos. Ella, desinteresadamente, se propuso ayudarlo a encontrar el cuerpo de su hermano.
Llegaron al lugar alrededor de las ocho de la mañana, junto a los padres de Rubén Zúñiga, quien también desapareció en el lugar hace casi tres años, sin que hasta ahora se hayan encontrado sus restos.
Allí permanecieron, al menos, un par de horas, donde rezaron y compartieron su dolor y recuerdos de sus seres queridos.
“Estoy totalmente tranquilo”, afirmó José Almonacid, quien agregó estar a la espera de la diligencias que debe realizar la PDI para proceder a secar y remover el Río Canelo, en búsqueda del cuerpo de su hermano Luis.
Extraño hecho
Un hecho extraño quedó al descubierto cuando ayer en la mañana Mary reveló las fotos que tomó con su celular en el lugar. Al revelarlas en la máquina de una conocida farmacia, se pueden observar figuras humanas de personas que nunca estuvieron presentes en el momento que la vidente, José y los padres de Rubén Zúñiga estaban en el lugar.
Según contó la tarotista, su intención era fotografiar a los caballos y vegetación del lugar. Sin embargo, jamás se imaginó que ayer, en la mañana, tras revelar las fotos del celular en una máquina de revelados, instalada en una de las farmacias del centro de Punta Arenas, se encontraría con estas fotos impactantes.
Asimismo, agregó que éstas están a disposición de quien quiera analizarlas para comprobar su veracidad, pues frente a las dudas o incredulidad que muchos pudieran tener, Mary asegura y afirma que dichas fotos no están trucadas ni montadas.